¿La revolución eterna?
Resumen
A finales del siglo XX se inicia en América Latina un proceso de democratización, el cual inicia en 1977 en Ecuador, que como efecto domino llegó a Argentina (1983), Uruguay y Brasil (1984), Salvador (1984) y Guatemala(1985). Estas transiciones presentan un nuevo escenario para la izquierda latinoamericana en donde se exige la renovación y evolución a nivel intelectual y político; esta evolución permite asimismo una consolidación y articulación de una nueva izquierda latinoamericana. Dentro de todo este proceso de renovación e internacionalización de un discurso, la Revolución Cubana sigue siendo un referente simbólico dentro de América Latina para la izquierda; en su momento, sirvió también como un halo de esperanza en donde se abrían las puertas para un cambio en la región y un llamado a retar la visión imperialista que había estado dominando el continente: “un nuevo pensamiento revolucionario”.